En cualquier ciudad, en cualquier país, encuentra los cimientos de algún edificio demolido y párate en el centro. Gira lentamente siete veces en sentido antihorario, mientras estás girando, lleva lentamente tus brazos sobre tu cabeza, tus manos deben tocarse en el momento exacto en el que completes la séptima vuelta.
Si has hecho todo bien te encontrarás de frente al oeste y habrás sido transportado a un gigantesco edificio; sin embargo si terminas mirando otra dirección, es tiempo de que grites cada blasfemia que tu dios jamás haya escuchado ya que él te acaba de abandonar.
La construcción se extenderá aun más alta que las nubes, más alto de lo que te puedas imaginar y su cara frontal será de más o menos 1.5 kilómetros hacia cada lado. El edificio parecerá estar hecho de acero pero si lo miras con detenimiento notarás que en realidad está echo de alguna especie de piedra. De otra forma su estructura no podría sostenerse debido a la cantidad de ventanas que no dejan de verse en toda la extensión que puedes apreciar.
Hay una puerta, una enorme entrada de piedra que es tan alta como un estadio de fútbol que se abrirá lentamente dejándote ver una luz cegadora. Parecerá que el sol es prisionero al otro lado de la puerta y es posible que escuches los pasos de alguien acercándose hacia ti, pero no podrás ver la figura a contraluz hasta que esté a unos pasos de donde te encuentras. Arrodíllate lo más rápido que puedas en cuanto sea visible, se sabe que da castigos algo extremos cuando percibe una "falta de respeto".
Mientras camina hacia ti, el suelo debajo de tus pies parecerá transformarse en el mismo material del que parece estar construida la torre. Entonces ella te hablará, contándote de los esfuerzos arquitectónicos más ambiciosos de la historia humana, un relato que hará que tu mente considere cosas que antes creía imposibles. Las ideas que ahora concibes podrían destruir tu mente, arrastrándote bloque por bloque hacia reinos de fantasía y especulación que nunca terminarán si no tienes la fuerza de voluntad necesaria para volver a la realidad.
Después de lo que parecerán días arrodillado ella mencionará la torre, si no has enfrentado al Portador de la Torre , sentirás un golpe aplastante en la parte de atrás de tu cabeza. Tu cerebro se verá obligado a salir a través de los orificios de tu cara mientras tu sientes cada desgarro en tu carne , cada fractura en tu cráneo y cada músculo y tendón desgarrado.
Por otro lado, si has obtenido el conocimiento de la torre donde estaban separados, debes levantarte inmediatamente voltearte. Una estatua exactamente igual a la mujer de antes estará ahí con los puños levantados, lista para golpearte la cabeza. Éste es el verdadero Portador de la Estructura, mírala a los ojos y exígele con la voz más estremecedora que puedas que te conteste: "¿De qué material fueron creados originalmente?".
Tan pronto como las palabras salgan de tu boca, la estatua emitirá un grito tan agudo que romperá todos los vidrios del antiguo monolito de piedra. No te estremezcas ni te cubras los oídos o los trozos de diamante molido podrían caer sobre ti y ensartarte. Cuando termine de gritar un último fragmento de vidrio con forma de lanza perforará a la mujer de carne y hueso que se encuentra detrás de ti; ella morirá en silencio, de pie, y en ese momento la estatua frente a ti se derrumbará dejando solo polvo y una piedra de un color rojo opaco cortada en miles de facetas.
Esa gema falsa es el objeto N°157 de 538. Tal como los creó, también podría destruirlos.