lunes, 1 de junio de 2020

Proyecto Abigail

Hoy es 14 de julio del 2004, es la fecha en la cual el Gobierno de los Estados Unidos de América decidió sacar a la luz la existencia de la muy conocida Área 51, desde su revelación miles y miles de teorías empezaron a hacerse entorno a esta. Aún hoy en día siguen surgiendo cada vez más y más, siendo muy probable que sigan generándose por un buen tiempo.

                                                         
El área 51 es considerado el más grande lugar de almacenamiento de teorías conspirativas de todo el mundo. Muchos darían lo que fuera tan sólo por poder adentrarse un poco y saber qué oculta en realidad. Considerado, el experimento humano más extremo de toda la historia: El Proyecto Abigail

Esta historia fue revelada por un encargado de limpieza del lugar en cuestión, el cual accedió ya que se le dio una cantidad de dinero extraordinaria por parte de un grupo de investigadores.

El relato comienza en el año 1945, época en la que el Área 51 operaba bajo el nombre de Campo Auxiliar De La Fuerza Aérea De Indian Springs. La segunda guerra mundial acababa de terminar con la victoria de Estados Unidos gracias a la ayuda que recibió de otros países, de no haberla recibido lo más probable es que el ejército nazi hubiera arrasado con los americanos. Según cuenta este hombre, en cuanto acabó esta guerra en el área 51 se empezó a discutir mucho sobre qué uso se le daría a la base puesto que, está en un principio se usó para guardar armas y el mejor equipamiento militar del país, después de mucho se decidió que seguiría en uso militar, pero también se le daría uno científico pues llegaron a la conclusión de que los nazis eran tan poderosos gracias a su constante experimentación con el cuerpo humano.

Teniendo esto en mente decidieron que ellos también deberían seguir estos pasos si mantenerse como una potencia mundial, fue así como uno de los científicos más importantes del lugar, conocido como Albert Wester, decidió iniciar un proyecto en el cual quería crear algo muy similar al Capitán América, por desgracia nadie estaba dispuesto a ser tratado como una rata de laboratorio y recibir en su cuerpo experimentos con el fin de que Albert cumpliera su sueño, adicional a esto, la persona a la que se iban a realizar los experimentos debería ser de absoluta confianza para Albert y en general para todo el área 51, ya que no querían que sus experimentos, de tener resultados positivos, pudieran caer en manos enemigas.

Después de mucho pensar Albert tomó una decisión muy dura. La persona indicada para recibir aquel experimento era su propia hija; Abigail Wester, una joven Universitaria la cual se estaba adentrando cada vez más en temas del área y así se hizo. La chica empezó a recibir todo tipo experimentos en su cuerpo, los cuales después de un tiempo, empezaron a tener efectos que Albert pudo notar. La apariencia de Abigail Estaba cambiando de una forma muy drástica, su piel empezaba arrugarse, los dientes le estaban creciendo de una manera descomunal y cada vez tenía menos razonamiento.



Varios colegas del científico le pedían encarecidamente que detuviera el proyecto Abigail, pero este no estaba dispuesto a llevar este experimento hasta sus últimos resultados y no porque odiaba a su hija, de hecho, era lo más preciado para él, solo que era consciente qué sin el proyecto, la joven moriría de una forma completamente inminente puesto que su cuerpo ahora dependía de todos los medicamentos que se le daban.

Otros miembros del Área 51, los cocineros, dijeron en sus entrevistas que preparaban platos enormes y los llevaban a una gran jaula, y que estos nunca supieron con certeza que había dentro de esta, pero lo que sí afirmaban con un poco de miedo es que lo que se encontraba allí era un monstruo. También decían que en varias ocasiones lograron ver a su jefe enfrente de la jaula, llorando o hablando con esta criatura.

Abigail perdió la razón y parecía algún animal salvaje.

Después de un tiempo todo fracasó, Albert se había dado cuenta del error que había cometido, Abigail ya no era la misma niña que había entrado en un principio, ahora era simplemente un monstruo el cual buscaba subsistir. Con esto en mente el hombre que ideó este fatídico proyecto se suicidó 2 años después de haberlo iniciado, no sin antes dejar una carta en la cual comunicaba a sus colegas que intentaran regresar a su hija a la normalidad o que por lo menos no la asesinaran. Con Albert fuera del camino, el ejército estadounidense no estaba dispuesto a gastar más presupuesto con el fin de devolverla a la normalidad, aunque si cumplieron la otra promesa la cual era dejarla con vida, ellos no la iban a matar de una forma directa, decidieron que el hambre fuera la encargada de asesinar a este monstruo.


Se dejó de hacer comida para Abigail, como resultado la primera noche muchos miembros del Área 51 aseguraron que se escuchaban aullidos y fuertes rasguños. En un momento se encendieron las alarmas, pero al ir a revisar qué pasaba y para su sorpresa el monstruo ya no se encontraba en la celda. Un rato después se encontraron muertos a dos guardias la criatura se había escapado hambrienta.

Inmediatamente se puso en progreso la idea de cerrar el área donde se encontraba la abominación con los materiales más fuertes del mundo. Al día de hoy han pasado 70 años de la realización del proyecto Abigail, aún pasado este tiempo muchos dicen que en el ala oeste del área 51 se logran escuchar rasguños. Una de las preguntas más grandes es como la joven convertida en un monstruo ha podido sobrevivir tanto tiempo.

A día de hoy se cree que Abigail es uno de los motivos por el cual el área 51 es tan resguardada puesto que no quieren que algún explorador pueda tener algún encuentro con ella y así terminar en consecuencias fatídicas.



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#055 El Holder de la Crueldad

En un lugar donde se reúnan presagios oscuros y donde la muerte haya maldecido la tierra, llama al cielo sin estrellas para pedirle consejo a "el portador de la crueldad". La tierra a tu alrededor que antes estaba contaminada comenzará a elevarse, un antiguo pedestal negro emergerá ante ti, con un cuenco tallado en un cráneo putrefacto.

En este punto, no hay retorno. Los ojos del cráneo en descomposición brillarán de un rojo sangre, y en tu mente, una voz perversa pero ronca zumbará:

Mors ultima linea rerum est

La noche se volverá aún más oscura, en el cuenco deberás reunir los corazones de los que más quieres, que comenzarán a latir al contacto con la superficie del recipiente. Si los corazones dejan de latir, te ennegrecerás. Si falla la solicitud, te ennegrecerás. Si decides suicidarte por haber esperado demasiado tiempo, te ennegrecerás.

Solo con los orgánicos latidos de unos corazones frescos, reunidos en el cuenco oscuro, el ennegrecimiento cesará. Los corazones empezarán a licuarse, formando una solución viscosa negra, profunda e impenetrable. Las voces de los ofrecidos te hablarán en una lengua desconocida. Aunque incomprensible, reconocerás sus voces, debes ser fuerte.

Concéntrate, ahora reúne los cadáveres de cinco de tus enemigos más odiados y llévalos al pedestal. Por sus gargantas deberán derramar su fluido contaminado. Ninguna gota debe caer en el suelo. Los cinco cadáveres se reanimarán como marionetas siendo levantadas por su maestro, cambiando de forma a seres retorcidos y ennegrecidos.

Para ellos, tú debes alimentarlos con cinco niños pequeños y vivos. No debes mostrar remordimiento de tus actos, esto no será tolerado ante sus ojos. A medida que la sangre de los niños sea bebida directamente de sus venas, deberás mirarlo todo, la agonía, los gritos, las lágrimas y el miedo, mientras se los devoran por completo. Soportarán el dolor de un siglo de tortura a medida que los consuman.

Cuando la prueba haya terminado, te rodearán. Exigirán solo una reliquia más: tu propio corazón. Sé apresurado: no sentirás dolor, no como los mortales. Cuando la ofrenda impía pasa de manos, también será consumida. Terminada la comida, las figuras se fusionarán y se disiparán en un aura negra brillante, eclipsando el cielo oscuro.

Los silenciosos susurros que ahora habitan tu mente forman el Objeto 55. Constantemente tratarán de consumirte. Cuando todo se haya ennegrecido, te guiarán hacia Él.



viernes, 1 de mayo de 2020

Difícil [Micropasta]

Es difícil dormir sobre la cama y criar a mis "hijos", más cuando yo les dije que no existía nada debajo de ella. Me llevé al padre y ahora tengo que actuar como él.


domingo, 5 de abril de 2020

Desde la Ventana

A veces pienso que son solo ideas mías, observo por la ventana y veo cuánto ha cambiado todo; observo por la ventana y veo que las personas visten de manera distinta, incluso su forma de caminar ha cambiado. Antes usaban los pies y ahora utilizan extraños objetos metálicos con ruedas. Las calles han cambiado, la tierra ha sido reemplazada por un material gris. Veo como las casas se han levantado hasta ser enormes gigantes que casi tocan las nubes. El ruido ahora es abundante, no tengo ni idea como la gente ni se inmuta por tan alarmantes sonidos. Las personas que veo siempre llevan extraños objetos en sus manos, que en ocasiones los llevan a sus oídos, ¿aliviaran algún problema? Mucha gente incluso camina sin ver hacia delante, solo concentrados en el extraño objeto, muy raro, ¿no? 
Veo que las disputas en las calles son algo cotidiano, el mundo ha llegado a un punto en el que es normal pelear en la calle y hasta se reúnen a ver eso, me río de ellos, veo regresión en su evolución, pero aun así los observo.

Por eso analizo gente, veo sus cambios, veo sus caras, en cada instante, en cada época; he pasado mucho tiempo observándolos, no sé cuánto ha pasado desde entonces, no sé cuándo comenzó ni cuándo terminará, ya perdí la noción del tiempo. Puede que te haya observado, o tal vez a algún pariente.

Al parecer los demás no pueden verme, no pueden notarme, ni siquiera sé si en realidad existo; lo único que me queda, es seguir observando gente desde mi ventana...



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jueves, 2 de abril de 2020

La llamada del Vacío

Es así como lo llaman, ¿Verdad? Ese sentimiento que tienes cuando estás justo en el borde y tienes la necesidad de saltar. Es bastante común, casi todo el mundo tiene esa sensación. Pero lo que mucha gente no sabe es que no siempre se supera.

A veces ese deseo de abalanzarte sobre el abismo se adueña de ti, y es cuando comienza. Tal vez ocurra cuando estas conduciendo hacia casa y sientes la necesidad de cruzarte de carril o puede que pase cuando vas al trabajo y quieras lanzarte delante de uno de esos trenes.

La única opción razonable es ignorarlo, pero dentro de ti sabes que ya es imposible deshacerte de esta sensación, y estas en lo correcto. Tan sólo puede ir a peor. Tras unas semanas el deseo se convertirá en una constante dentro de tu cabeza, empujándote en contra de ese instinto de la evolución por sobrevivir.

Pronto dejarás de poder concentrarte en las pequeñas tareas, como disfrutar de la cena, porque te estarás preguntado como sería cortarte las muñecas con el cuchillo de la carne.

La misma cosa me pasó a mí. Me estaba quedando sin opciones, así que decidí volver al principio. Me quedé plantado en el borde ante el vacío, suplicándole que me dejara en paz.

Entonces es cuando escuché ese susurro.

“Salta.”


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viernes, 20 de marzo de 2020

En el Armario

Todos los días cuando me iba a dormir siempre observaba un gran armario muy antiguo que estaba en mi pieza, lo que lo hacía especial era que por las noches podía ver que se abría y quedaba así un momento y luego su puerta se cerraba. Siempre me pregunté qué era lo que lo abría. Cuando era niño se lo conté a mi madre pero no me creyó, pues estuvo toda la noche sentada en mi cama esperando algo, pero esa noche no salió.

Una noche al acostarme, no quería ver al armario así que me di vuelta hacia la pared, cuando comencé a cerrar los ojos pude ver una sombra pasar, me di vuelta pero no había nada y la puerta estaba abierta, me levante y la cerré, al recostarme se volvió a abrir. Comencé a mirarlo y no había nada inusual, pero de repente comencé a notar algo raro dentro del armario, era una sombra gris que se movía de una forma extraña, me levanté y encendí la luz, pero ya no había nada. Apagué la luz y volvieron a estar allí, al parecer no les gustaba la luz, me senté en la cama y le hable:

—Hola, mmmm…¿ustedes quieren algo? 

Una voz extraña pero a la vez dulce le respondió:

—Si…solo queremos jugar…hace tiempo que no nos divertimos.

— ¿En serio y a que quieren jugar?

—Ven acércate.

Me levanté y me acerqué al armario, de repente una de esas sombras grises se aferró a mis brazos y otra a mis piernas, no podía moverme, intente gritar, pero mi voz no salía era como si no tuviera cuerdas vocales.

Entré en desesperación y comencé a llorar, pero nadie oía mis gritos y no sabía que era lo que pasaba. De repente otra sombra se impuso frente a mí e ingresó a mi pecho, sentí un terrible y fuerte dolor, sentía que mi cuerpo moría, de repente se encendió la luz y entro mi madre al cuarto, las sombras desaparecieron y yo caí al suelo y me golpeé la cabeza, mi madre me levanto y pregunto qué había pasado, le conté todo pero no me creyó.

Pero aceptó que me cambiara de cuarto con mi hermano mayor ya que desde esa noche jamás volví a acercarme a un armario por las noches y aún me pregunto que hubiera sucedido si mi madre no hubiera entrado….



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miércoles, 18 de marzo de 2020

El Extraño Encuentro

Todo comenzó un sábado. Ya eran más de las 9 de la noche, estaba con mi grupo de amigos en una fiesta y hasta ese momento no había pasado nada malo, pero de repente, de la nada se corta la electricidad, todos pensamos que era una broma, pero no fue así. La puerta del lugar en el que estábamos, se encontraba cerrada, de repente alguien llamó, todos los que estábamos adentro nos empezamos a asustar, uno de ellos abrió la puerta y lo único que vimos fue un perro negro, furioso y con los ojos rojos. Yo vi como a cada uno de nosotros nos recorrió un escalofrío, mis amigos estaban pálidos. De todos los presentes fui la única que me acerqué, cerré la puerta y la electricidad volvió... en ese transcurso a lo menos pasaron 4 minutos, algunos todavía no lo podían creer, otros no lo tomaron en cuenta y continuaron con la fiesta.

Pasado un rato todos se calmaron, nadie recordaba lo que había pasado. Al terminar la fiesta todos acordamos de ir al cerro, pero esa fue nuestra peor decisión. Al llegar a los pies del cerro, algunos empezaron a ver luces entre los árboles, otros a escuchar ruidos... pero ya estábamos allí y no era nuestra intención retractarnos. Empezamos a subir lentamente, andábamos con una sola linterna la cual la traía mi amigo Ale, todos estábamos un poco asustados, pero al mismo tiempo entusiasmados. Muy pocos sabían de la leyenda que tenía el cerro, así que entre los que la sabíamos la empezamos a relatar:

"Todos los que suban al cerro un domingo a la madrugada, no tendrán mucha suerte, puede que sobrevivan, pero la experiencia no la olvidarán jamás"-esas fueron las últimas palabras del abuelo de Tom. 

La historia en sí, se trata de un grupo de expedicionistas que todos los sábados regresan a buscar su alma que quedó en este mundo a causa de que cuando los mataron, sus cuerpos fueron tirados al vacío.

Para cuando habíamos terminado de contar la historia, todos estaban más que asustados y cuando menos lo imaginábamos empezamos a sentir pasos ligeros que cada vez se acercaban más. Todos quedamos petrificados, en el ambiente ni siquiera la respiración de nosotros se escuchaba, sólo se escuchaban pasos y más pasos...

De repente uno de nosotros sintió cerca de él una respiración alterada y profunda la cual empezaba a aumentar cada vez más, mientras se seguía por pasos.Todos estábamos consientes de lo que pasaba, pero nadie lo podía asumir...cuando pudimos voltear hacia atrás, no vimos nada, en el aire sólo se sentía la respiración agitada de cada uno de nosotros y el pasar del viento.

Seguimos subiendo, pero ahora nos guiaba el terror, el entusiasmo había quedado muy atrás... Llegamos a un mirador para descansar un rato y sentimos algo que se escabullía entre los arbustos, miramos para el lado sin encontrar nada, luego cuando nos volvimos hacia el frente, lo vimos ahí, era el mismo perro que se nos había aparecido en la fiesta, tal como antes, estaba furioso, con unos ojos rojos que penetraban en los nuestros, comenzamos a sentir que algo nuevamente se acercaba. El perro se había vuelto loco y ladraba desesperadamente y al intento de tirarse sobre nosotros salió corriendo, pero no ladrando, sino gimiendo, como si algo o alguien le hubiera hecho algo.

Uno de nuestros amigos sintió una mano en su hombro y nos dijo susurrando: ¡Ayuda! todos miramos hacia él y sólo pudimos ver la sombra de algo escalofriante, luego la luz de la luna cayó sobre el ser extraño y sólo ahí nos dimos cuenta de quién era...la figura representaba una persona humana que vestía un traje negro, pelo largo y oscuro y lo único que resaltaba en ella eran sus manos, estaban cubiertas de sangre. Sin pensarlo dos veces nos paramos, no sé como, estábamos aterrorizados...Pero ella nos habló, de primera con una voz muy dulce, diciendo:

"¿Qué hacen ustedes en este lugar?, ¿No saben qué este lugar es sólo mío?, váyanse de acá en este mismo instante o sus cabezas serán cortadas y sus cuerpos quemados". Nosotros atónitos escuchábamos, sólo eso, porque no podíamos hablar ni siquiera para pedir disculpas o simplemente salir corriendo.

Con una voz mucho más ronca nos dijo:

"Han venido en busca de los expedicionistas o simplemente tras mi fiel amigo...¡"El Diablo"!...

De repente detrás de ella aparece el perro, que nos miraba con un profundo rencor, mientras que nosotros le devolvíamos una mirada de pánico. En ese instante deben haber sido las 5:30 am aproximadamente. El sol ya empezaba a salir, nosotros nos alegramos mucho, porque cuando los primeros rayos del alba llegaron donde estábamos nosotros, la imagen de la Mujer comenzó a desvanecerse como un cubo de hielo y el perro desapareció en la nada misma.

Ya no había nada más de que asustarse, el peligro ya había pasado. Pero aún así nos sentíamos aterrados... Cuando bajamos del cerro, cada uno se fue a su casa y prometimos no contarle a nadie lo que había pasado ya que nadie nos creería.

Este relato ocurrió a principios del mes de noviembre del año pasado y cada vez que lo recordamos como grupo, nos deprimimos mucho.



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