miércoles, 8 de julio de 2020

#293 El Holder de la Supresión

En cualquier ciudad, en cualquier país; ve a cualquier lugar donde prevalezcan los computadores. Puede ser un cibercafé, un centro de copias, un centro de internet o cualquier lugar en el que puedas pensar siempre y cuando haya muchos computadores en el sitio. Pregúntale a cualquier persona que veas ahí si puedes hablar con "El Portador de la Supresión". Si los ojos de la persona se abren y te mira incrédulo, has encontrado el lugar correcto; si ves cualquier otra reacción huye por tu alma y no mires atrás.

Te llevarán por un pasillo hasta una parte del edificio que nadie parece haber usado durante mucho tiempo, a medida que caminas por el pasillo notarás que la tecnología parece ser cada vez más anticuada, hasta que finalmente llegarás a una habitación con un solo computador.

Lo primero que notarás es que el computador no parece estar conectado a ninguna fuente de poder aunque se vea de una generación mucho más antigua de las que conoces, de alguna manera funcionará y lucirá como nuevo. Esta es tu última oportunidad de alejarte, habrá un mensaje en la pantalla requiriendo que entres siéntate en el escritorio y escribe la pregunta: "¿Dónde están ahora?

La habitación se desvanecerá a tu alrededor y te encontrarás en un vacío, el computador se manifestará frente a ti como una forma de marco brillante de alambre, uniendo cables que antes no estaban ahí, conectándose con lo que percibes como tu cerebro. El flujo de datos que entrará en tu mente informará de cada fiasco que surgió como resultado de la tecnología, trascendiendo el tiempo y el espacio, los eventos futuros no se pierden para este Portador. Cada pieza de información que se haya eliminado, desde la más insignificante y estúpida, hasta la más importante y crucial pasará por tu mente mostrándote todas las consecuencias horribles con un lujo de detalles insoportable. Solo aquellos que tengan la fortaleza del calibre necesario sobrevivirán a este torrente de datos sin convertirse en parte de la fuente de alimentación inagotable y perpetua del computador.

Notarás que este vacío es todo lo que se ha eliminado, ya sea inadvertidamente o a propósito y rápidamente te estás convirtiendo en parte de este todo; solo el poder de tu imaginación originada en el fondo de tu ser, será tu gracia salvadora si decides buscar este Objeto. Intenta Hablar o nombrarte de vuelta a la existencia, este computador solo comprende ciertos aspectos acerca del fenómeno conocido como vibración.

Si tu imaginación es lo suficientemente fuerte te manifestarás en la habitación inicial, pero el monitor estará apagado y una de las teclas del teclado se encontrará en tu mano izquierda. Abandona el recinto inmediatamente porque alguien podría necesitar traer algo de vuelta...

Si quieres que algo desaparezca permanentemente (incluso otras personas, si en verdad eres sádico y malvado o tienes otros motivos) solo debes pensar en lo que quieras eliminar y tocar la tecla "Supr" que tienes ahora para eliminar su existencia. Sin embargo, si lo utilizas demasiado eventualmente todo lo que quedará serás tu y todos los objetos que se reúnen gradualmente incluso si ya intentaste previamente usarlo en alguno de los otros 538 objetos. No pensaste que sería así de simple ¿verdad?


La clave de eliminación es el Objeto N°293 de 538. Por muy poderosa que sea su recompensa, aún debes encontrar otra forma de evitar que se reúnan.

Si quieres que algo desaparezca permanentemente (incluso otras personas, si eres verdaderamente sádico y malvado), solo piensa en lo que sea y toca la tecla de borrar que tienes ahora; entonces dejará de existir. Sin embargo, si lo usa demasiado, eventualmente todo lo que quedará será usted y todos los Objetos, reuniéndose gradualmente, incluso si previamente intentó usarlo en un Objeto. No pensaste que sería así de simple, ¿verdad?




La clave de eliminación es el Objeto 293 de 538. Por muy poderoso que sea su premio, aún debe encontrar otra forma de evitar Su reunión.


SCP-005 Llave Maestra

Ítem #: SCP-005

Clasificación del Objeto: Seguro

Procedimientos Especiales de Contención: SCP-005 no supone un riesgo inmediato de ninguna manera directa. Aun así, sus funciones únicas requieren que se tomen medidas especiales para restringir el acceso y la manipulación del objeto. Se requiere la aprobación de al menos un (1) empleado de Nivel 4 para la extracción del objeto de su área de contención.

Descripción: La apariencia de SCP-005 se asemeja a la de una llave ornamentada, mostrando las características de una típica llave producida en masa y usada durante la década de 1920. La llave fue descubierta cuando un civil la usó para infiltrarse en una instalación de alta seguridad. SCP-005 parece tener la capacidad única de abrir cualquier forma de bloqueo (véase Apéndice A), ya sean mecánicas o digitales, con relativa facilidad. El origen de esta capacidad no ha sido determinado aún.

Notas adicionales: SCP-005 puede ser usado como un sustituto de pases de seguridad perdidos, pero sólo bajo la supervisión de al menos un (1) empleado de Nivel 4. SCP-005 no puede ser usado para reparaciones de la máquina expendedora, abrir taquillas o como llave de repuesto para la vivienda de cualquier empleado. Extraer el objeto del recinto puede acarrear la eliminación inmediata.

Apéndice A: Si bien SCP-005 ha demostrado ser efectivo en la eliminación de cualquier sistema de bloqueo, otros experimentos muestran que los esfuerzos para camuflar el propósito o la identidad de un bloqueo han resultado tener un cierto grado de éxito derrotando la capacidad de SCP-005. En aproximadamente el 50% de los casos donde un voluntario no era capaz de identificar un sistema de bloqueo como tal, SCP-005 no tuvo éxito en la desactivación del dispositivo de bloqueo. Debido a estos resultados, el SCP-005 ha sido clasificado provisionalmente como "consciente" y se están llevando a cabo otras pruebas para determinar sus capacidades cognitivas. Sin embargo, no hay resultados que muestren los rasgos que le impiden ser capaz de identificar un dispositivo de bloqueo en particular, a no ser que el citado dispositivo haya sido ocultado y disfrazado.

El Hombre sin Ojos

Era 30 noviembre del 2004, como siempre mis amigos y yo nos disfrazamos para la fiesta que organizaba mi escuela y luego nos iríamos a recoger dulces. Pero mientras paseábamos por el pueblito (no es muy grande) a mi amigo Marco se le ocurrió una idea: ir a ver la casa abandonada en medio del campo de girasoles.

Todos aceptamos el reto y tomamos las bicicletas, en menos de media hora ya habíamos dejado atrás el bosque y nos adentramos a la zona de campo; dejamos las bicis arrimadas a un árbol y cruzamos el campo de girasoles.

¡Esa casa si que daba miedo! Estaba toda oscura, despintada y fea…como los caserones infestados de las películas de terror. Nos armamos de valor y con las linternas que habíamos llevado con nosotros entramos. Recorrimos toda esa casa hasta el sótano y como no pasó nada de interesante decidimos irnos, también porque ya eran las 7 de la tarde y no era bueno estar ahí hasta pasado el anochecer...cuando quisimos alcanzar la puerta para salir de esa casa esta se cerró dejando todo a oscuras.

Al principio no nos asustamos porque teníamos las linternas pero luego empezaron a oírse pasos y risas por todo el cuarto, todos apuntábamos las linternas a donde venía el ruido pero no se veía absolutamente nada; yo ya estaba muerta de miedo pero grité como una loca cuando sentí una mano fría sujetar mi brazo.

Ya teníamos suficiente y Marco alcanzó por primero la puerta e intentó abrirla pero no pudo, tuvimos que romperla a patadas para poder salir de ahí. Salimos corriendo, pero Oscar tropezó y cayó cerca mio, trate de ayudarlo a levantarse pero era como si algo lo estuviera aplastando, el pobre gritaba y yo no sabía qué hacer.
De repente recordé que mi abuela decía siempre "si algún fantasma o espíritu se aparece reza o insulta" y eso hice. Los dos comenzamos a rezar y luego de algunos instantes mi amigo se pudo levantar, le ayudé a ponerse de pie y en ese momento mi mirada se desvió a la entrada de la casa. ¡Ahí lo vi!.

Era un hombre alto, grueso, con un pantalón oscuro y un buzo claro... me estremecí hasta lo más profundo de mi alma al darme cuenta de que esa figura no tenia ojos, sus cuencas vacías como una calavera parecían mirarme aún sin tener ojos.

Mis amigos dijeron que me encontraron arrodillada con Oscar intentando hacerme reaccionar, estaba como en un trance, completamente quieta con la mirada clavada en la puerta de la casa. Una bofetada me sacó de ese estado y luego me incorporé y miré nuevamente la casa... no vi nada.

Volvimos rápidamente al pueblo y aunque les conté lo que había visto, no me quisieron creer y yo acabe pensando que solo fue mi imaginación.

A pesar de todo esa noche nos divertimos mucho y contamos nuestra experiencia como una broma, una que casi nos mata del susto. Antes de irme a la cama noté que tenía una marca roja en el brazo... la huella de una mano grande, no le di importancia ya que podía habérmela hecho mi padre, ya que el tiene la mano pesada, pero al día siguiente me enteré que mi amigo Oscar tenía marcas muy grandes en el cuerpo.

La semana siguiente alguien notó la puerta rota y fueron a investigar, por suerte no encontraron rastros nuestros, pero ellos también escucharon algo. Dos días después el sacerdote nos preguntó si habíamos visto algo (Nos conocía y nosotros éramos sus principales sospechosos). Le contamos con la condición de que no se lo dijera a nuestros padres. Cuando escuchó lo que le contamos estaba pálido como un papel.

—Hija, estás segura— Preguntó.

—Si padre, ellos no lo vieron, pero yo si— contesté.

—Viste al espíritu del hombre que vivió ahí— agregó.

Todos nos petrificamos en ese momento

—Así es, hace cincuenta años ahí vivía una familia. Un día la esposa y los hijos se fueron a visitar a una tía y el hombre se quedó solo. Esa noche fue asaltado por unos cultistas que nunca fueron identificados, solo se encontró el cuerpo del hombre al cual le habían arrancado los ojos, en el centro de un pentáculo— nos contó el padre. No pueden imaginar el terror y la angustia que sentí en ese instante.

—Los atacó porque entraron a su casa, tal vez solo quería asustarlos, pero ustedes lo enfrentaron y se enfadó.

—Es verdad— Pense —No nos fuimos enseguida, sin querer lo hicimos enojar y nos quiso dar una lección.


Al siguiente mes se realizó un exorcismo en esa casa y luego fue demolida, nunca volví a ver a ese hombre... tal vez ahora finalmente descansa en paz.



Calificación:


martes, 7 de julio de 2020

SCP-500 Panacea

Ítem #: SCP-500

Clasificación del Objeto: Seguro

Serie: Series SCP I

Procedimientos Especiales de Contención: SCP-500 debe ser almacenado en un ambiente frío y seco, y debe evitarse el contacto con luces brillantes. Solo se permitirá el acceso a SCP-500 a personal con acreditación de seguridad de nivel 4 para prevenir su malgasto.

Descripción: SCP-500 es una pequeña lata de plástico que al momento de escribir este reporte contiene cuarenta y siete (47) píldoras rojas. Una píldora tomada oralmente, curará todas las enfermedades del sujeto en un plazo de dos horas, donde el tiempo exacto dependerá de la gravedad y la cantidad de enfermedades que posea el sujeto. A pesar de las extensas pruebas, todos los intentos de sintetizar más de lo que se piensa que podría ser el ingrediente activo de SCP-500 han fracasado.

NOTA DEL DR. KLEIN:

EL PERSONAL SCP BAJO NIVEL 3 TIENE DESDE AHORA PROHIBIDO MANIPULAR A SCP-500. NO DEBE SER USADO PARA CURAR RESACAS. CONTÁGIATE CON VIH Y ENTONCES PIDE PERMISO.

Solicitud 500-1774-k

El Dr. [500-0022F] solicitó una (1) píldora de SCP-500 para realizar pruebas con SCP-038. La solicitud ha sido aprobada.


Solicitud 500-1862-b

El Dr. Gears solicitó una (1) píldora de SCP-500 para realizar pruebas en SCP-914. La solicitud ha sido aprobada.


Solicitud 500-2354-f
El Dr. █████████ solicitó una (1) píldora para realizar pruebas con SCP-253. La solicitud ha sido denegada.

Solicitud 500-5667-e
El Dr. Gibbons solicitó dos (2) píldoras para su botiquín personal. La solicitud ha sido denegada.

Anexo 500-1: Se ha autorizado el uso de dos (2) píldoras para usarse con SCP-008. Como resultado de la realización de una serie de pruebas en sujetos clase D infectados con SCP-008, parece ser que incluso en los estados más avanzados de la infección basta una sola píldora para lograr la cura total. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y siete (57). - Dr. [500-0021D]

Anexo 500-2: Se ha autorizado el uso de una (1) píldora para usarse con SCP-409. SCP-500 fue probado en el sujeto 409-D5 que fue expuesto a los efectos de SCP-409. Se logró la recuperación completa. Ver anexo 409-1. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y seis (56). - Dr. [500-0021D]

Anexo 500-4: Solicitud 500-1774-e aprobada. Se ha autorizado el uso de cinco (5) píldoras para usarse con SCP-038. Se ha determinado que SCP-038 es capaz de duplicar SCP-500; sin embargo, el éxito de las píldoras duplicadas es limitado. Las píldoras duplicadas sólo son efectivas el 30% de las veces, con su efectividad descendiendo mientras más tiempo pase entre la clonación y su uso. En el 60% de los casos donde la infección es permanente, los síntomas de la infección permanecen, aunque la infestación adicional es neutralizada. Se recomienda que todo el personal que sufra de enfermedades incurables consuma repetidas dosis de las píldoras clonadas con SCP-038, ya que el suministro de SCP-500 es extremadamente limitado. Las cinco (5) muestras de SCP-500 usadas en las pruebas fueron devueltas. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y seis (56).

Anexo 500-5: Durante los experimentos con SCP-038, una (1) píldora fue robada por el miembro de personal D-██████ para, según se informa, "curar una resaca". Se sugiere un control más estricto para las muestras de SCP-500 usadas en otros proyectos. D-██████ ha sido terminado. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y cinco (55).

Anexo 500-6: Se ha autorizado el uso de una (1) píldora para usarse con SCP-231-4. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y cuatro (54).

Anexo 500-7: Se ha autorizado el uso de una (1) píldora para el experimento 447-a. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y tres (53).

Anexo 500-8: Se ha autorizado el uso de una (1) píldora para usarse con SCP-208. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y dos (52).

Anexo 500-9: Solicitud 500-1862-b aprobada. Una (1) píldora fue colocada en SCP-914 con la configuración "Fina". El objeto resultante ha sido clasificado como SCP-427. Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cincuenta y uno (51).

Anexo 500-10: Se han extraído cinco (5) píldoras para el Proyecto Olimpia, aunque sólo dos (2) fueron usadas las tres (3) restantes serán devueltas a la brevedad. Luego de su retorno el número de píldoras será cuarenta y nueve (49).

Anexo 500-11: Se ha autorizado el uso de dos (2) píldoras para el experimento 217-█████-█████.Al momento de esta inscripción el número de píldoras es de cuarenta y siete (47).

Anexo 500-12: La solicitud de investigar SCP-500 por compulsión mental que conduce a fijación obsesiva se ha denegado por considerarse trivial.

Carne

Hace muchos siglos existía un pequeño pueblo en la mitad de la nada, éste tenía una población gigante y lo más importante, un rey.

El nombre del rey no ha sido recordado, pero se dice que fue una persona “devoradora”, posiblemente debido a que además de gobernar el lugar como si fuera un juego, se devoraba la mayoría de la comida que ya no podrían comer los pobres.

Muchos de los recursos no llegaron a durar para los tiempos fuertes por lo que el pueblo y el rey se quedaron sin nada. Fue entonces cuando sin despeinarse, mandó a que buscaran “carne” y otros alimentos para sobrevivir a la escasez que tenían. La búsqueda duró dos semanas, no encontraron nada, los otros pueblos estaban también en escasez de recursos; todo estaba perdido.

Las personas del pueblo comenzaron a debilitarse y a enloquecer, los habitantes destruían, se agredían y estaban dispuestos a cualquier cosa para no morir. El único que no parecía desesperado era el rey ya que aunque no encontraran comida en otro lugar, siempre le encontrarían una solución.

Mientras todo se venía abajo, varias personas fueron desapareciendo misteriosamente sin dejar un rastro o un indicio de su paradero. Pero para el rey ya había una solución, solamente para él había carne y no se tardó un segundo en meditar de donde provenía.

El rey permanecía en su trono esperando la comida, los animales entraron a la cocina, fueron asesinados, faenados y convertidos en el valioso producto.

Desfilaban los sirvientes con platos, cubiertos y en una bandeja de oro, la carne.

El gobernante comenzó a comer: devoraba, desgarraba, rompía y tragaba el líquido rojo que emanaba de su banquete, hasta quedar completamente sucio con esta sustancia.

Los sirvientes comenzaron a retirar los huesos y restos de los animales, mientras que el rey salía feliz y satisfecho del comedor. Al terminar uno de los mozos no pudo evitar preguntarle a su compañero:

—Te puedo hacer una pregunta ¿Que comió exactamente el rey?— preguntó.

—Carne— Respondió un joven que limpiaba detrás de la mesa.

—¿Carne? ¿cómo que carne? en este pueblo nunca ha habido animales— agregó asustado el muchacho.

—No lo sé, aunque me preocupa que los mendigos no hayas salido aún de la cocina.



Calificación: