domingo, 17 de noviembre de 2019

La Chica del Balcón

Era una noche tranquila, y la verdad, no sé, sabía que no debí salir, lo sentía, lo presentía. Soy Carolina, y tengo una historia que contarles, sobre lo que le pasó a mi amiga Anna. Este es un tema que me ha venido atormentado desde que tenia 17 años, ahora tengo 21 y no consigo paz, mi amiga... Anna, no sé qué pasó con ella, sólo no sé.

Anna y yo éramos muy unidas, cuando ella hacía algo yo también la seguía, de igual forma ella conmigo. Una noche, no sé por qué ni cómo algo me gritaba por dentro "No salgas, no... " pero por esas ironías de la vida un poco después llamó Anna, atendí el teléfono y preguntó si quería salir y yo por algún motivo, ignoré esa voz en mi cabeza que claramente y a gritos decía que no saliera, y contesté que la acompañaría. Ella emocionada me cito en la plaza, y yo, dudosa pero a la vez con cierta emoción corrí a mi pieza. Media hora después, nos vimos en dicho lugar, y salimos de ahí en su auto, íbamos por la carretera, y vimos una casa a lo lejos, vieja y fea, como era de esperarse, ella en ese momento dejó de ser la chica tranquila y cobarde de siempre, y por algún motivo se aventuró a explorar la casa, yo le supliqué que no entrara pero ella sólo me dijo que exageraba, que qué podía pasar, entonces la seguí y al entrar al sitio todo era obscuro y penumbroso, lleno de polvo y telarañas. Estábamos tranquilas ya que sabíamos que en en una situación en la que estaba la casa, el estado de ella era normal,aunque sí era algo asqueroso...

En fin, nos adentramos a la casa. Anna sólo llevaba una pequeña linterna de repuesto que sacó de su coche, yo sentía que eso estaba mal sabía que no deberíamos estar allí, pero sólo callé, Anna sólo reía, y en una expresión burlona al momento de girar, una cosa extraña que parecía una especie de mezcla entre azufre y polvo, la arrastro por las escaleras de la casa, yo solo intenté tomarla del brazo, y ella sólo gritaba, en mi desesperación, tomé un trozo de madera, y golpeé al azar, cuando esa cosa se detuvo, paré de golpear, y en ese momento me di cuenta que había matado a mi mejor amiga. Una energía que tal vez había sido desprendida de ese ser, empezó a recorrer su cuerpo, de pronto, ella abrió los ojos, me asusté y di 2 pasos hacia atrás, Anna empezó a elevarse como levitando, yo salí corriendo de allí, y sólo había corrido unos cuantos metros, cuando de adentro emanó una explosión que me dejo inconsciente.

Al despertar, vi que aparecí en mi cama, como si todo hubiese sido un sueño, entonces, llamé a mi amiga, pero no contestaba su teléfono. Salí con lágrimas en los ojos, y me resigné a asumir que mi amiga había muerto y que ese "sueño" era real, entonces conduje hasta la casa, no recordaba bien el camino pero di con el lugar, entré en ella y en ese momento la casa se "selló" completamente, no podía salir, me quedé en un rincón escondida, sólo podía escuchar voces y risas como ecos dentro de la casa. Ya eran las 1:30 am, y no podía salir de allí .

Paso 1 hora, 2 horas, hasta que por fin, una puerta se abrió, sentí mucho miedo al pensar qué la había abierto, pero no dudé en salir de esa casa por medio de ella. Ya afuera mientras corría directo al auto, sentí una brisa caliente y brusca que sopló por todo el alrededor volteé, y en el balcón de esa casa, había algo que parecía una chica, de la cual emanaba energía dorada, y estaba conformada por fuego y azufre, me dispuse a correr, pero tuve un presentimiento, y me quedé observando su rostro, el cual me pareció familiar, y... Era ella, ¡Anna! ella me observaba, y sentí su voz, ella decía que todo estaba bien, y que yo siguiera siendo feliz.

Es un ejemplo de la amistad eterna sin duda, ella me quiere, y yo a ella... Por eso, cuando veas a alguien en el balcón de tu ventana, sólo no tengas miedo, es Anna, y está allí para ayudarte a recuperar a tus amigos o está por ahí ayudando a alguien más...



Calificación: 



viernes, 15 de noviembre de 2019

#038 El Holder de la Precisión

En cualquier ciudad, en cualquier país, puedes ir a cualquier institución mental o centro de rehabilitación donde pueda llegar por ti mismo. Dirígete a la recepción, solicita visitar a aquel que se hace llamar "el portador de la precisión". En caso de que una expresión de terror y tristeza caiga sobre la cara de la recepcionista, te han encontrado, y ninguna cantidad de carrera te salvará.

Sin embargo, si su rostro muestra una expresión de emoción e incredulidad, has venido al lugar correcto. Te llevarán a la puerta más cercana y te la abrirán. Debes atravesar la puerta exactamente tres segundos después de que la abran. Ni mas ni menos. Después de caminar, la recepcionista cerrará y cerrará la puerta detrás de usted. Descubrirá que ahora está de pie en un campo de tiro con puntos tomados a cada lado de usted hasta donde puede ver. Las personas que toman estos lugares son buscadores que han fallado. Están condenados a una eternidad de esclavitud irreflexiva, incapaces de invocar el libre albedrío suficiente para poner fin a sus propias vidas con las armas tan tentadoramente al alcance de la mano.

Tome el único lugar abierto que está directamente en frente de usted. Notarás que hay un rifle convenientemente colocado en una mesa cercana. Tan pronto como lo recojas, aparecerá un objetivo al final del campo de tiro. Tendrás cinco rondas y deberás golpear el centro del objetivo con cada una de ellas. Si falla el primer disparo, el Buscador a su izquierda le pondrá el arma en la cabeza y apretará el gatillo. Si golpeas la primera vez pero luego pierdes otro tiro, te unirás a los Buscadores que han fallado en su estupor sin sentido.

Sin embargo, si logras golpear la diana las cinco veces, el campo de tiro desaparecerá, y te encontrarás en un negro vacío frente a un hombre vestido con una gabardina negra y un sombrero de fieltro marrón oscuro, pero no estarás capaz de ver su cara. Este es el titular. Si está fumando un cigarro, entonces no lo encuentra digno de continuar su viaje, y lo empujará al vacío para caer por la eternidad. Si está fumando un cigarrillo, entonces cree que eres capaz de progresar. Él te hará señas para que hables. Debes preguntarle:

¿Cuántas personas trataron de detenerlos?

Luego te dirá con gran detalle cuántas personas trataron de evitar que los objetos se perdieran, cuántas rondas se dispararon, cuántas batallas se libraron, cuántas guerras comenzaron, entre otras cosas. No te preocupes Pocos se han vuelto locos por esta información. El hombre te entregará el rifle que usaste en el campo de tiro. cualquier ronda que cargues en este rifle nunca se extenderá y siempre disparará donde apuntes. El hombre te dará un gesto respetuoso y caminará hacia el vacío. Sentirás una fuerte ráfaga de aire y luego te encontrarás frente al lugar al que llamas hogar.

Ese rifle es el Objeto 38 de 538. ¿Cuántos disparos se necesitarán para detenerlos?


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jueves, 14 de noviembre de 2019

Frío

Hoy es uno de esos días en los que la soledad te aprieta hasta dejarte sin aire. Sentado en la barra de un bar de mala muerte, intento ahogar mi melancolía en una buena dosis de alcohol.

Todo es igual que ayer, que el mes pasado, que hace tantos años; es decir, nada de especial, nada que valga la pena el seguir viviendo. Solo un milagro podía salvar aquella miserable existencia; y el milagro estaba a punto de producirse. De repente se abre la puerta del local y apareció ella.

Misteriosa, bellísima, con un aire nostálgico y soñador. No era de aquí, o al menos no la había visto con anterioridad, así que me propuse conocerla. Me costó acercarme a ella, no tenía ninguna base de partida para romper el hielo, para poder aproximarme. Me parecía distante, lejana... Casi imposible que un ser tan hermoso como ella se pudiese fijar en un despojo humano, que era exactamente en lo que me había convertido. Sé tú mismo pensé; no pretendas impresionarla; simplemente que vea tal y como eres. La estrategia dio resultado; ella también estaba pasando por unos momentos difíciles, muy similares a los míos; no tardó en haber entre nosotros un lazo estrecho de complicidad.

Pasamos el resto de la noche juntos; hablamos de mil cosas, de nuestras vidas, de nuestros sueños que nunca cumplimos, de los que nos gustaría hacer realidad. Nos conocimos a fondo; nuestros miedos, nuestras inquietudes... No sé si se podía definir como amor, pero lo cierto es que entre aquella misteriosa dama y yo, se había creado una fuerte corriente de sentimientos.

Cuando los primeros rayos de sol se reflejaron sobre nuestra desnudez, comprendí que había llegado el momento de la despedida. Con la voz entrecortada me susurró que había sido una noche maravillosa, pero que tenía que marchar. Intenté disuadirla, retenerla; había encontrado un ser maravilloso con quien compartir mi soledad, y como siempre iba a volar de mi lado. Aquello había sido la tónica de mi vida.

Tengo frío, me comentó entre susurro; toma mi cazadora, ya me la devolverás, de este modo tendremos una excusa para volver a vernos; ¿Te parece? Ella accedió con una sonrisa. Se colocó mi cazadora sobre los hombros, al tiempo que escribía en una pequeña hoja una dirección. Toma, pasa esta tarde por aquí y te devolveré la cazadora. La idea me pareció genial, ese gesto significaba que la volvería a ver, que quizás en esta ocasión no perdería a alguien que me parecía importante.

—¿Cómo te llamas? No me lo has dicho.

—Claudia, me llamo Claudia.

Nos dijimos adiós con la promesa de volver a encontrarnos aquella tarde. Las horas se me hicieron eternas, esperando que llegara el momento de encontrarnos de nuevo. Cuando llegué a la dirección que Claudia había escrito, me quedé desconcertado. Estaba delante de un cementerio. Al principio imaginé que se trataba de un error; quizás lo había escrito mal; seguro que había una explicación lógica.

Algo me empujaba a entrar en el recinto, notaba un extraño magnetismo que me empujaba a cruzar la puerta. Entré, y sin saber bien porqué, busqué compulsiva mente por todas las calles del cementerio. Nicho por nicho, tumba por tumba. Una lápida de mármol blanco, una sencilla foto, y una breve inscripción:

"Claudia Serrano, abril del 65; enero del 2004. Nunca te olvidaremos".

Noté como algo dentro de mí se rompía en mil pedazos. La chica de la foto sin duda, era aquella muchacha que había conocido horas antes. Al lado de un marchito ramo de flores; mi cazadora impecable mente doblada.



Calificación:       

miércoles, 13 de noviembre de 2019

#037 El Holder de la Confusión

En cualquier ciudad, en cualquier país, puedes ir a cualquier institución mental o centro de acogida donde puedas llegar por ti mismo. Dirígete a la recepción y pide visitar a aquel que se hace llamar "el portador de la confusión". Inicialmente, la empleada te ignorará, pero si esperas un minuto, se levantará y te indicará que la sigas. Te adentrarás por una serie de pasillos tenuemente iluminados, llegando a un corredor sin salida ni puertas. La empleada te acompañará hasta el final del pasillo y regresará sin decir una palabra.

Debes caminar hasta el final del pasillo. Una vez hayas llegado, coloca tus manos sobre la pared para revelar que es una ilusión por la que puede caminar. Si tienes miedo, o no estás seguro de lo que hay detrás del muro cuando cruces, o tienes alguna duda, simplemente saldrás del plano de la existencia para siempre, nunca más se volverá a saber de ti.

Pero si crees en ti mismo y crees que las respuestas se encuentran más allá de la pared, cuando cruces aparecerás en una habitación blanca y brillante con muchos caminos. Algunos conducen a la distancia, otros parecen no conducir a ninguna parte, mientras que otros parecen desafiar la comprensión y conducir a un sufrimiento que solo las almas más condenables pueden comprender.

El camino que buscas es el que tienes por delante. Parece continuar por la eternidad. Tómalo con calma, no debe decir nada, no importa cuánto tiempo parezca tomar el viaje, y si el lugar comienza a oscurecerse a la mitad del viaje, tu única opción es sentarte y llorar en silencio, porque ya no eres más que alimento para un grotesco demonio.

Sin embargo, si la habitación sigue siendo de un blanco casi insondable, tu viaje por el camino será tranquilo, y seguramente llegarás a una puerta. En este punto, no necesita hacer nada, ya que la puerta se abre para revelar una habitación que parece imposible. No es grande, pero tampoco pequeña. No está iluminada, pero no está oscura. Parece ser todo y nada. Iguales y opuestos, nada tiene sentido en esa estancia. La mayoría de los que ingresan son conducidos a una locura enloquecedora y comienzan a rasgar su propia carne, o se destripan con sus propias uñas, todo mientras se ríen maníacamente. Nunca muriendo, este será su destino para la eternidad.

En caso de que no seas conducido a la locura, notarás una figura indescriptible en el centro de la locura. Parece ser humano, pero al mismo tiempo, algo mucho más infernal. No podrás comprender esta entidad visualmente, pero no debes rechazar su vista, ni puedes decirle nada. Comenzará a hablarte sobre muchos eventos. Algunos de los cuales sabes son ciertos. Otros que conoces son mentiras. Algunos de los cuales no estás seguro. La entidad se agitará cada vez más por ignorar sus tonterías. Debes abstenerte de decir algo, hasta que la entidad se quede en silencio brevemente y luego pregunte:

¿Qué harías si todos se unieran?

A esto, debes responder firmemente:

Todo lo que harías. Incluyendo lo que no harías.

La entidad te mirará fijamente por un momento. Si no te cree, simplemente se irá y te dejará allí, para siempre en la oscuridad. Sin embargo, si te cree, extenderá su mano y te dará un pequeño objeto brillante aparentemente inmaterial. Esta es la "Resolución de la Bestia".

Ese es el Objeto 37 de 538. No importa cuán indeciso seas, no importa cuán inseguro se vuelva el mundo, solo tú debes saber qué hacer si todos se unen.


lunes, 11 de noviembre de 2019

Aluxes

Nombre: Alux, Aluxo'ob
Origen: Mitología Maya
Fecha: Siglo XVI
Temperamento: Travieso
Tamaño: Pequeño
Raza: Elfo
Ubicación: Sureste de México, Belice y Guatemala.





Antecedentes:

Son el equivalente maya a lo que conocemos comúnmente como duendes. Son pequeños seres que no sobrepasarían los 40 cms de estatura, con una apariencia semejante a la de una pequeña persona y la vestimenta típica maya. 

Según los relatos, los aluxes son invisibles para la mayoría de la gente, pero suelen asumir forma visible para comunicarse, asustar humanos o congregarse entre ellos. 

Suelen ser asociados con lugares abundantes en naturaleza como selvas, grutas y campos, pero también pueden llegar a moverse a zonas urbanizadas para buscar ofrendas.

Algunos mayas contemporáneos aún creen que los aluxes son convocados en cuanto un campesino construye en su propiedad una especie de altar en una casita conocida como kahtal alux o "la casa del alux", normalmente en su milpa. Durante siete años, los aluxes ayudarán a crecer el maíz, llamar la lluvia y vigilar los campos de noche, silbando para espantar a los animales de rapiña o delatar a los ladrones. Al final de los siete años, el granjero debe cerrar las ventanas y las puertas de la casita, sellando al alux dentro. Si esto no es así, se puede perder el control sobre el alux y éste empezará a comportarse de forma agresiva en contra de las personas.

Algunos mayas contemporáneos aún consideran que los altares les son útiles en sus labores de campo (aunque sus orígenes y el propósito verdaderos de estos les sean desconocidos).

Existen también antiguos relatos que indican que los Alux'ob se detienen en los caminos para pedir ofrendas, si se les niegan el Alux causará mala suerte, enfermedades y estragos; pero si se le recompensa, el Alux protegerá a la persona de cualquier peligro del camino y le traerá buena suerte.



#036 El Holder de la Fe

En cualquier ciudad, en cualquier país, puedes ir a cualquier institución mental o religiosa donde puedas llegar por ti mismo. Dirígete a la recepción, cierre los ojos y solicita visitar a aquel que se hace llamar "el portador de la fe". El empleado te mirará con una confusión abstracta, sacudirá la cabeza y volverá a su trabajo. Si esperas durante 3 minutos, él suspirará y te guiará al armario del conserje. Te pedirá que entres y te encerrará allí. La puerta no se abrirá y estarás completamente a oscuras. Poco a poco la oscuridad comenzará a describir, en la más blanca de las palabras blancas, en un idioma que nunca has leído y voces que nunca has escuchado, hablando de las más terribles blasfemias que tu cuerpo puede soportar.

Si el soliloquio alguna vez se detiene, arrodíllate y junta las manos, gritando cada oración que conoces. Si la escritura no continúa, maldice al dios que lo ha creado.

Si la escritura continúa, párate rápidamente y corre hacia la oscuridad, ya no habrá puerta ni paredes. Allí, distinguirás que estás en un túnel que se abre en una gran cúpula, verás a una joven vestida de blanco, mirándote con el pelo caído sobre la cara. No mires tus manos, o comenzarás a desgarrar la carne de tu rostro con ellas y no podrás detenerlas. La joven solo responderá a una pregunta: 

¿Por qué temen?

Ella te admirará y su boca dejará escapar cada error que haya ocurrido en nombre de un dios, y algunos que debes creer sucedieron más allá de tu realidad. Luego caerá al suelo gritando en horrible agonía mientras es consumida por una llama blanca.

Sus cenizas son el Objeto 036 de 538. Algún día se mezclará con la tuya



domingo, 10 de noviembre de 2019

El Niño del Bote

Se cuenta que en un domicilio que se ubica en Calle Galeana 1976, cerca de lo que es hoy el puente sobre la avenida ayuntamiento. Vivía un matrimonio con su pequeño hijo.

Hubo un tiempo en que el pequeño se mostraba sumamente nervioso y preguntaba a sus padres—¿Quién juega y llora en la azotea todas las noches?— los padres no le tomaban ni la mas mínima importancia, y contestaban: 

—ha de ser un gato ¡duérmete!—, el pobre niño despertaba a media noche, asustado, porque sobre el techo de su cama se escuchaban gemidos, y el sonido de una lata rodando continuamente de un lugar a otro. Llamaba a sus padres, pero estos desde su habitación le ordenaban volver a dormir. Incluso intentaba dormir con ellos, pero también se lo impedían.

Una de tantas ocasiones, el matrimonio fue despertado a mitad de la noche por un grito de terror proveniente de la habitación del niño, y después de eso no pudieron encontrarlo por ningún lado. 

Dieron aviso a las autoridades y al siguiente día, al volver a casa después de un largo día buscando a su hijo hasta que notaron un bote atado con un lazo colgar desde la azotea. Con algo de enojo el hombre logra subir al cobertizo y ve otro bote tirado sobre el techo de la recamara de su hijo, al acercarse encuentra a su hijo en un rincón sentado en cuclillas, abrazando sus piernas con el cuerpo totalmente arañado y su rostro mostrando un gesto de infinito terror…¡Sin vida!.

El matrimonio terminó por mudarse, pero en su nuevo hogar al llegar la media noche los despertó el sonido de un bote rodando en la azotea de la casa nueva y parado frente a su cama, vieron a su hijo quien les decía:

 —Me asusta el ruido de allá arriba.

Después de eso no lo volvieron a ver, pero cada año en el aniversario de su muerte, se escucha el ruido del bote y el llanto del niño.




Calificación: